Aumentar la demanda y el precio promedio de vino chileno, creciendo un 3,2% en volumen y un 6% en valor.
Incrementar competitividad del sector vitivinícola.
Una característica de Chile es su capacidad para producir una amplia variedad de vinos de alta calidad, en cuanto a cepas y estilos, resultado de una diversidad geográfica, climática y suelos privilegiada en el mundo vitivinícola, compuesta por 18 distintivas regiones vitivinícolas, a lo largo de 1.400 kilómetros de extensión de norte a sur, sometidas a influencias tanto costeras como andinas y condiciones climáticas perfectas para producir uvas sanas y de alta calidad.
La sustentabilidad compone un elemento esencial para la industria vitivinícola nacional, cuyos objetivos son convertirse en el mayor productor de vinos premium, sustentables y diversos del nuevo mundo. Este es un compromiso transversal dentro del sector y se refleja en el programa de sustentabilidad del Consorcio I+D Vinos de Chile, el cual cuenta con una serie de proyectos de investigación como el Código de Sustentabilidad, orientados a mejorar la competitividad del sector vitivinícola y el desempeño de las viñas en materia de sustentabilidad.
Diversos estudios demuestran que el producto más asociado a Chile y emblemático de nuestro territorio es el vino, producto que llega con Marca País a millones de consumidores finales de todo el mundo con el origen “Chile” claramente impreso en la etiqueta, contribuyendo a la positiva recordación y promoción de la industria del vino y de nuestra nación.
Gran parte del éxito de la industria del vino en Chile, en las últimas décadas, se correlaciona directamente con una mayor inversión en innovación y tecnología, con la finalizad de mejorar los procesos de producción y los estándares de calidad.
Para continuar este progreso, la industria creó el Consorcio I+D, un ente técnico dedicado a proyectos de investigación y desarrollo que abordan las necesidades de las bodegas y se llevan a cabo en conjunto con universidades e investigadores nacionales e internacionales de alto nivel. Sus tres principales enfoques son la mejora de la calidad de los viñedos, el programa de sostenibilidad y la transferencia tecnológica.